LAGO ENOL DE COVADONGA: " DONDE NACE LA LEYENDA"

El pasado jueves 16 de Agosto, tuve la enorme suerte de acompañar a mis amigos del grupo GAIPO: Alex y David Madrazo,  a uno de los rincones mas hermosos de nuestra tierra asturiana: " Los lagos de Covadonga".
Allí rodeados de ese paraje único y en comunión con nuestra madre naturaleza, pudimos disfrutar de un día casi mágico y acercarnos como no a la leyenda y misterio que envuelve dicho lugar....
Aquí os dejo con la preciosa leyenda del LAGO ENOL:

En los terrenos que hoy cubren las aguas del lago Enol, existía en tiempos remotos una majada, donde tenían construidas sus cabañas un buen número de pastores.         Cuenta la leyenda que un día se desencadenó sobre aquellos parajes un gran temporal, que obligó a guarecerse a todos los pastores, reuniéndose al calor de la lumbre para conversar juntos. Estaban entretenidos en animada charla, ya pasada la media noche, cuando se presentó en una de las cabañas una pobre niña, empapada de agua y temblando de frío, que pidió la dejaran guarecerse del temporal hasta que pasara la noche. Los pastores, burlándose de su temor, la echaron de allí entre groseros insultos. Lo mismo sucedió en las restantes cabañas de la majada. ORILLA DEL LAGO ENOL         La niña, perdida en aquellos vericuetos, se alejó sollozando; pero al poco tiempo se encontró con una gruta en la que la tempestad no parecía azotar con la misma violencia. Penetró en su interior y vio a una pastorcita que estaba rezando para que se apaciguara aquel temporal. La pastorcita se volvió hacia la niña y la saludó cariñosamente; al ver el lamentable estado en que se encontraba, le ofreció leche y pan, que la niña aceptó agradecida.         Mientras esto ocurría en el interior de la gruta, fuera la tempestad se embravecía más a cada momento, y el agua caía torrencialmente sobre la majada, un nuevo diluvio parecía querer inundar aquellos terrenos. RESTOS DE ANTIGUOS ASENTAMIENTOS, QUE PODRÍAN ARROJAR UN POCO DE LUZ ACERCA DE LA LEYENDA DEL LAGO....         Así transcurrieron lentas las largas horas de la noche, hasta que al fin las primeras luces del amanecer llegaron a la gruta y la lluvia, poco a poco, dejó de caer. Entonces la niña y la pastorcita pudieron contemplar el horrible espectáculo que se ofrecía ante sus ojos: la majada en la que la pasada noche se alzaban aún las cabañas de los pastores, se había convertido ahora en un profundo lago, donde no quedaba ni rastro de vida. Ante tan tremendo desastre, la niña no pudo contener su dolor y empezó a derramar abundantes lágrimas, que al tocar el suelo se fueron convirtiendo en margaritas. Unos instantes después desapareció, quedando la pastorcita deslumbrada por una luz sobrenatural, dándose cuenta entonces de que había pasado la noche con la Virgen. ¿ QUÉ SECRETOS SE OCULTARÁN BAJO SUS AGUAS? CON EL LAGO ENOL AL FONDO.