jueves, 25 de agosto de 2011

EL MONASTERIO DE SAN ANTOLÍN DE BEDÓN " LLANES"

El pasado 21 de Agosto, tuve la gran suerte de conocer de la mano de mis amigos del grupo GAIPO, un lugar lleno de una gran fuerza y rodeado como no del misterio y la leyenda:


EL MONASTERIO DE SAN ANTOLÍN DE BEDÓN


A diez kilómetros de la villa de Llanes y cerca de la desembocadura del río Beón, donde comienza el valle de San Jorge, se ve en el solitario y romántico paisaje, rodeado de montañas, el antiguo y abandonado monasterio de San Antolín. Su fundación data de fines del siglo X, y siempre lo habitaron monjes de San Benito hasta el año de 1544 que fue abandonado y pasaron a San Salvador de Celorio. Es de arquitectura bizantina, con alguna mezcla de gótico, como resultado de la restauración a principios del siglo XIII por el abad llamado Jacobo.


Acudíamos a este enigmático lugar, simplemente con el fin de visitarlo, pues años atrás el grupo GAIPO, había llevado a cabo sobre el terreno, una exhaustiva investigación, a raiz de los extraños acontecimientos que allí sucedieron.
Los recuerdos de las vivencias allí vividas afloraban en la mente de nuestros guías de viaje David Madrazo y Yolanda Peón , (  Grupo Gaipo) . Paso a paso, recorriendo aquel hermoso lugar, que poco a poco con la caida de la tarde iba siendo envuelto por una densa niebla, nos fueron relatando sus experiencias, a la vez que iba sintiendo como la fuerza de aquel lugar me iba envolviendo...

Un origen de leyenda.
Varias leyendas se escribieron sobre las causas de la fundación de este convento. En una de ellas se dice, que el Conde Muñazán, amaba con ciega pasión a una bellísima joven llena de encantos y atractivos. El Conde libertino, aunque de arrogante figura, se dirigía un día a la casa de la doncella, cuando avistó a cierta distancia un enorme jabalí; que no bien le apunta con la ballesta, cuando el animal desaparece como una sombra, ocupando su lugar una misteriosa luz que iluminó el espacio algunos momentos.
Creyendo el enamorado galán ver en esto una señal, o más bien, una revelación del sitio en que había de entregarse a la meditación y al rezo; y que de aquí nace la fundación del monasterio.


ESCUDO DEL MONASTERIO
Esta versión es tal vez la más arraigada a leyenda, fantasía y heroicidad. Pero no explicaría los motivos de por qué el Conde dejó sus pertenencias para fundar el monasterio.
En otras, se supone que el Conde Muñazán, o más bien Munio Rodríguez Can, conocido por ambos nombres, había sido sorprendido por violenta tempestad, en una partida de caza, sin poder ver una choza en la que albergarse, y que abandonado al instinto del caballo que montaba, cerró la noche y se encontró entre tinieblas, rasgadas a veces por fuertes relámpagos.
Después de mucho correr llegó a un sitio en que percibió débil resplandor a poca distancia, que salía de una cabaña, a la que se aproximó, y lanzando una mirada al interior, vio de rodillas a una bellísima joven, a quien llamaban la huérfana de San Antolín; que encendido el pecho del Conde de impuros deseos, entró y la requirió de amores con pomposas ofertas, y hasta con amenazas, tratando de sujetarla con sus brazos. Ella se desprendió de el huyendo de la cabaña, y al pretender seguirla Don Munio, un vivísimo relámpago le deslumbró, quedando todos los alrededores sumidos en densas tinieblas.
A los primeros albores del día siguiente, por más que buscó a la muchacha, no pudo encontrarla; la joven pasó aquella noche de frío y horror, azotada por la lluvia, en el estrecho hueco de un humilladero, pidiendo a San Antolín que la librase de su miserable perseguidor. Algunos días después, andaba el Conde por las montañas de San Antolín, y se acercó a la vivienda de la huérfana y al mirar por la ventana como la primera vez, una feroz sonrisa plegó sus labios, crispó los puños, y su boca lanzó una blasfemia, por haber visto con las manos enlazadas, y el rostro resplandeciente de dicha doncella, sentados en un escalón, a dos jóvenes, que eran la huérfana y su amante llorado, que sano y salvo volvía de lejanas tierras a aquel nido de amor.
La furia de los celos nubló el cerebro del Conde y armándose de dos lanzas, las arrojó con fuerza, una después de otra, sobre los enamorados, dejándolos cadáveres; y penetrando en la cabaña contempló su obra, y ante aquel asesinato sintió un profundo malestar; sus ojos miraban sin ver y un rumor confuso agitaba su alma, principio de un remordimiento que despertaba. Tuvo miedo y huyó.
PÓRTICO DE LA IGLESIA


En todas partes y a cada momento, la conciencia le gritaba Asesino, y por más que trató de ahogarla, por espacio de cinco años, no pudo conseguirlo. Arrastrado Muñazan providencialmente hacia San Antolín por tercera vez, tuvo allí la milagrosa aparición de los dos jóvenes amantes, quienes con los ojos fijos en su asesino, le mostraban las heridas aun vertiendo sangre, y entonces, el ángel Custodio, inspiró a Munio Rodríguez el pensamiento de construir allí un monasterio.
Así lo hizo y, abandonando los lujos mundanos, vendió todas sus pertenencias, y lo cambio por el tosco sayal, encerrándose en aquel con otros no tan necesitados de la divina clemencia.
La leyenda de la dama y su amante se ha mantenido hasta nuestros días: La huérfana de San Antolín, aquella a la que el Conde de Muñazán dio muerte, a la cual empaló con una lanza junto a su amante, que se le aparecieron a este repetidamente incluso después de fundar el monasterio por remordimiento, incluso después de renunciar a todas sus pertenencias para que Dios librase de pecado su alma, torturándolo hasta el fin de sus días.


Son muchos los testimonios de personas que hoy en día, han afirmado ver en las cercanías del monasterio a una mujer, vagando, y a veces, acompañada de otro hombre, vestido de época, heridos, con las ropas ensangrentadas…
Además el lugar es visitado con frecuencia por numerosas personas , a veces aficcionados a las psicofonías y por investigadores de lo paranormal, que han obtenido resultados verdaderamente interesantes.
Para seguir ahondando un poco más en los misterios que alberga este santo lugar , hemos de hablar de los dos colosales sepulcros en forma de ataúd que se encuentran a uno y otro lado de la puerta principal, se hallan desnudos de todo adorno, si se exceptúa una espada y dos pequeños blasones esculpidos en el uno, y en el otro un tosco y gastado relieve del calvario, y un águila dentro de un escudo.
Sin duda, lo más probable es que el conde de Muñazán, fue enterrado en el lugar, de forma anónima o como figura perteneciente a la iglesia, dado que se alejó de sus pertenencias, incluida su pose social de Conde.


LÁPIDA CON EXTRAÑA INSCRIPCIÓN


¿Puede que la sepultura de la extraña inscripción sea la tumba del conde de Muñazán? es posible. Fuentes historiadoras que revisaron la inscripción nos comentaban que la figura de ese báculo con la inscripción era el símbolo de una figura eclesiástica importante en ese monasterio, probablemente, su fundador o una figura importante en el transcurso de su historia.
¿Dónde enterró el conde de Muñazán a sus víctimas? No sabemos nada referido a la figura del amante, ninguna historia hace referencia a él, pero, la huérfana sospechamos que también se halle enterrada allí, pero no se sabe con certeza. ¿Tal vez fuese el motivo por el que el alma de la dama se pasea por allí, para indicar donde está su cuerpo, o tal vez el de su amante?


Así pues tras haber escuchado insitu aquella leyenda y las posteriores investigaciones llevadas a cabo por mis amigos del grupo GAIPO, aquel lugar me impregnaba de su magia, casi sin quererlo.
No quería dejarme ningún detalle de aquel paraje sin que quedara grabado en mi cámara digital, así que las fotos se fueron sucediendo una tras otra...
Cual sería mi sorpresa cuando al llegar a mi casa, al ponerme a ver aquellas fotos tomadas, me encontré con la presencia de misteriosos y llamativos orbes , que parecían deambular por aquellas imágenes.
¿ Serían presencias extrañas?...
Quien sabe, las fotos están ahí para comprobarlo, juzgad vosotros mismos.
EXTRAÑOS ORBES ALREDEDOR DEL CONVENTO
ESTOS ORBES ERAN DE GRAN TAMAÑO...

 Lo que os puedo decir es que el Monasterio de San Antolín de Bedón , no me ha dejado indiferente...
ORBES EN EL INTERIOR DE LA CAPILLA

Ya de regreso al coche, no pude evitar fijarme en un extraño árbol casi en medio del camino , que llamó poderosamente mi atención, como pude comprobar más tarde, había algo a su alrededor que parecía querer manifestarse.....


Aquí se puede apreciar un orbe de gran tamaño que parece flotar al lado del árbol



En el mismo árbol esta vez aparecen tres orbes más pequeños que parecen querer avanzar por el camino, resultan extraños ¿no os parece?
Como siempre las respuestas a estos interrogantes, están ahí afuera....

Si quereis saber más acerca de la investigación llevada a cabo por el grupo GAIPO, en el Monasterio de San Antolín de Bedón, lo encontrareis en : www.gaipo.es



 

4 comentarios:

  1. Hola!! Ya sabes q tu blog me parece alucinante, así que te he dejado un premio en mi blog ;)
    http://rinconrevuelto.blogspot.com/2011/08/segundo-premio-para-rincon-revuelto-mis.html

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  2. Bueno, tu blog no deja indeferente a nadie que lo lea y le guste todo esto del misterio. A mí particularmente me encanta, pero luego paso un miedo que me muero..Muy buena la entrada. Saludos

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  3. Gracias a las dos sois un cielo, mil besos desde la oscuridad ;)

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  4. Me encanta el artículo, la verdad, pero los orbes en concreto parecen más bien motas de polvo en la lente no?

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